El gasto en ADSL es sin duda uno de los gastos más comunes en cualquier tipo de empresa o negocio. Sin internet hoy en día no se puede hacer prácticamente nada en la mayoría de empresas y es completamente necesario para un correcto funcionamiento de los trámites del día a día.
Y es que ya se para prestar un servicio de atención al cliente, para gestionar la contabilidad o para hacer trámites en la banca online, el servicio de ADSL es algo tan básico como las facturas de electricidad o agua. Pero no siempre es tan beneficioso como podría serlo, y es que a veces las compañías ofrecen precios por este servicio muy desorbitados.
Uno de los motivos de que el ADSL tenga un coste tan elevado es que en la mayoría de contratos con las compañías viene incluido un servicio de telefonía fija, lo que se conoce como cuota de línea. La cuota de línea puede llegar a incrementar el coste del servicio hasta un 50% respecto a lo que las compañías anuncian en televisión, por lo que hay que analizar muy bien las ofertas para no caer en engaños.
La cuota de línea, un gasto innecesario
Aunque existen operadores que compensan el gasto de la cuota de línea con un mayor número de megas lo cierto es que este tipo de ofertas son innecesarias para la mayoría de empresas. Las pymes no necesitan grandes incrementos en la velocidad, lo que más les puede beneficiar es una reducción en el precio, algo que se solo se consigue sino se tiene contratado la cuota de línea telefónica.
En la actualidad existen opciones para evitar tener que pagar la cuota de línea. Se pueden firmar contratos con compañías en las que este concepto esté excluido y prescindir de línea fija de teléfono. Esto es posible gracias a que hoy en día se puede realizar llamadas por internet con sistemas de voz IP, por lo que podemos prescindir del teléfono fijo al volverse innecesario.
Ventajas de no tener teléfono fijo
Entre las ventajas que una empresa puede conseguir al evitar el pago del teléfono fijo, las más importantes son las que se muestran a continuación:
Ahorro en costes
Sin duda la ventaja principal de no tener un teléfono fijo es el ahorro en costes que esto supone. Las facturas mensuales serán mucho más reducidas al no incluir la cuota de línea y la empresa podrá destinar ese dinero a lo que crea conveniente en su actividad. Y es que las empresas necesitan ahorrar en telefonia y en todo lo posible en diferentes categorías de gasto para mejorar su rentabilidad económica y financiera , que a veces se ve mermada por gastos como este.
Menos mantenimiento y averías
El mantenimiento de una línea telefónica es a veces un auténtico engorro. Las averías en las líneas telefónicas son bastante frecuentes y normalmente no se arreglan hasta pasadas unas horas, con el consiguiente perjuicio que esto puede causar en las empresas. Además de las averías en la línea telefónica también se evita el gasto que supone el terminal en sí mismo, que con el uso permanente que se le da en una empresa se deteriora rápidamente y hay que estar cambiándolo constantemente.
Mayor flexibilidad
Al no centrar la actividad telefónica de la compañía en un teléfono fijo se evita el tener que estar enganchados al terminal si tienen cable, pero si son inalámbricos tampoco te puedes separar demasiado del punto donde está establecido, por lo que resulta muy incómodo. Al evitar un teléfono fijo se gana en flexibilidad, ya que si por ejemplo en un momento puntual con un pico alto de actividad de la empresa se necesita un teléfono es mucho más versátil contratar una línea de teléfono móvil.
Posibilidad de fibra óptica
Si en cualquier empresa se prefiere dar el salto del ADSL tradicional a la fibra óptica hay que evitar que las empresas de telefonía quieran incluir el teléfono fijo con su cuota de línea. Y es que con la fibra óptica no se necesita el cable de cobre para tener acceso al ADSL y por tanto es mucho más prescindible el teléfono que incluso si se tiene ADSL. La fibra óptica además es perfecta para realizar llamadas VoIP, algo a lo que las propias operadoras terminan recurriendo al querer evitar los clientes la cuota de línea.
Y es que aunque las compañías de teléfono u operadoras siempre van a querer incrementar las facturas a los consumidores, sean particulares o empresas, hay que estar pendientes para evitar que nos imputen gastos adicionales que no se han solicitado. Además con la llegada de la fibra óptica el teléfono fijo y el gasto tan elevado que supone la cuota de línea se ha hecho completamente prescindible, por lo que hay que evitar a toda costa asumir este coste si se contrata fibra.